No es mala poeta Coral, pero de verdad no tiene sentido darle un rango tan amplio a este premio, con todas las lenguas romances que incluyen países francófonos y lusófonos de extintas colonias, para terminar siendo localista y ratonero premiando poetas de menor calado como Huerta y Bracho nada más por ser mexicanos.
Pasar de Cartarescu, posible Premio Nobel, a Coral Bracho es bajar varios escalones de un chingadazo.
Yo creo que Huerta tiene su mérito, especialmente después de leer
Incurable. Entiendo que podría criticarse el premio a Huerta por haber sido él algo muy parecido a un cacique cultural, sobre todo en la poesía, pero creo que una buena parte de su obra se sostiene, y a buen nivel.
Bracho me parece una muy buena poeta, y pienso que el hecho de que sus temas no sean tan ambiciosos y que su mirada se detenga más en el lenguaje y en las cosas más pequeñas no demerita su trabajo. Más bien, creo que le da una pluralidad interesante de perspectivas al premio. Me gusta que el premio haga posible que más gente lea a Coral.
Ahora, si habláramos de políticas rastreras y rancias de la FIL Guadalajara (y de cómo es usada como plataforma de las alas políticas más conservadoras y mafufas del país), no acabaríamos, pero esta no me parece una de esas movidas.